El cantón Saraguro, en la provincia de Loja, es conocido por su vibrante cultura indígena, impresionantes paisajes montañosos y, recientemente, por su auge en la producción de café de especialidad. En este contexto, la Hacienda San Lorenzo ha destacado por su enfoque pionero en la producción de café de alta calidad con un toque de tecnología moderna, sin perder la esencia de la tierra y su tradición. Este café, conocido como Café San Lorenzo, honra tanto al santo patrono de la hacienda como a las generaciones de productores que, con orgullo y técnica, han elevado el perfil del café ecuatoriano.
El Café San Lorenzo: Un Producto con Historia
Los cafetales de la Hacienda San Lorenzo se extienden a través de una geografía irregular que caracteriza a la provincia de Loja, protegidos por las montañas y cuidados con esmero por los habitantes saraguros. El café que se cultiva en San Lorenzo no solo es un grano de alta calidad, sino que también lleva consigo una historia profundamente entrelazada con la cultura local y el conocimiento ancestral. La comunidad saraguro ha cultivado y cuidado estas tierras durante generaciones, y el café que producen simboliza esta conexión entre cultura y naturaleza.
Cada etapa de la producción del Café San Lorenzo, desde la siembra hasta la cosecha, es cuidadosamente ejecutada. Este café se ha ganado su lugar entre los productos más valorados de la región, no solo por su calidad, sino también por la dedicación y el orgullo de la comunidad que lo cultiva. Con cada taza, los consumidores disfrutan de un café único que resalta las tradiciones de Saraguro.
Innovación y Tecnología: Elevando el Café de Saraguro
La Hacienda San Lorenzo ha combinado técnicas tradicionales con tecnología avanzada, siendo una de las primeras en Saraguro en implementar sistemas de riego y monitoreo inteligente de cultivos. Estas innovaciones permiten optimizar el rendimiento y asegurar una calidad constante, un factor importante para competir en el mercado internacional de cafés de especialidad. En lugar de depender de métodos convencionales, esta hacienda apuesta por la precisión y eficiencia en cada aspecto de la producción.
Gracias a estas tecnologías y al entorno natural privilegiado de Saraguro, el Café San Lorenzo ha logrado destacarse en concursos y catas internacionales. La altitud, el clima y la geografía se combinan para crear un perfil de sabor que es único en el mercado, permitiendo que este café compita con marcas de prestigio en mercados especializados. La tecnología, sin embargo, no reemplaza las tradiciones, sino que las complementa, asegurando que el Café San Lorenzo mantenga su esencia saragura.
Agroturismo en Saraguro: La Ruta del Café
La Hacienda San Lorenzo no solo se centra en la producción de café, sino también en brindar a los visitantes una experiencia de agroturismo auténtica y educativa. A través de recorridos, los visitantes pueden explorar el proceso de producción de café, caminar entre los cafetales y conocer la historia y las tradiciones de la comunidad saraguro. Uno de los recorridos más populares, “La Papaya”, realizado con apoyo de la Prefectura de Loja, ofrece una inmersión completa en el mundo del café.
Los turistas aprenden sobre la importancia de la biodiversidad, la sostenibilidad y la calidad en la producción de café mientras participan en degustaciones de café recién tostado. Además de generar ingresos adicionales, este enfoque de agroturismo crea conciencia sobre el valor del entorno natural y el respeto por la tierra. Los visitantes se llevan no solo una experiencia única, sino también un aprecio renovado por el café lojano y la dedicación de sus productores.
Café Ecológico Las Aradas: Sostenibilidad desde Quilanga
En San Antonio de las Aradas, en el cantón Quilanga, otra historia de éxito en la producción sostenible de café está en marcha. Aquí, el Café Ecológico Las Aradas reúne a más de 40 caficultores que forman parte de la Unión de Artesanos “El Colmenar”. Esta organización se dedica a la producción ecológica, promoviendo prácticas sostenibles que no solo benefician al medio ambiente, sino también a la comunidad.
Los caficultores de Las Aradas producen tanto café natural como café lavado, ambos bien recibidos en el mercado local e internacional. Las prácticas de producción ecológica no solo protegen el entorno, sino que también elevan el perfil del café lojano en los mercados de especialidad. Café Las Aradas demuestra que es posible alcanzar rentabilidad mientras se promueve la sostenibilidad, un enfoque que beneficia a las futuras generaciones de caficultores en Quilanga.

Chaguarpamba y su Café Único: Surapo y Chaguarcafé
Chaguarpamba, en la provincia de Loja, también ha sido protagonista en la producción de café de alta calidad. Marcas como Café Surapo y Chaguarcafé provienen de esta región montañosa, en la que las condiciones climáticas y la geografía crean un entorno perfecto para el cultivo de café de especialidad. Ubicado a las faldas del Cerro Surapo, también conocido como “Pan de Azúcar”, el cafetal de Iván Rojas produce granos que destacan por su sabor único.
El Café Surapo, en particular, es reconocido por su equilibrio entre acidez y dulzura, lo que le da un perfil sensorial distintivo. Estas características han permitido que el café de Chaguarpamba gane reputación en el mercado nacional y extranjero, consolidando a Loja como una región clave en la producción de café de calidad.
Café Dagadá: Tradición en Cada Taza
tro de los tesoros del café lojano es Café Dagadá, una marca que ha logrado posicionarse en el corazón de los consumidores locales. Este café, producido con una cuidadosa selección de granos, representa la tradición y el gusto lojano en cada taza. Para muchos lojanos, una taza de Café Dagadá es el inicio perfecto de su día.
Además de café, Dagadá ofrece otros productos locales, brindando a los consumidores una experiencia completa de sabor y cultura. Su compromiso con la sostenibilidad y el respeto al entorno natural son valores que la marca ha mantenido desde su fundación, lo cual ha ayudado a consolidar su reputación en Loja y más allá.
Innovación en Olmedo y Catamayo: Papá Café y El Tostador
Papá Café, en el cantón Olmedo, es una empresa familiar que se ha comprometido a mejorar la cadena de valor del café, garantizando un producto de calidad constante. Su enfoque en la sostenibilidad ha sido clave en su crecimiento y les ha permitido destacar en el mercado local.
En Catamayo, El Tostador, fundado por Carlos Jaramillo en 1996, ha experimentado un notable crecimiento desde sus inicios en Cuenca. Actualmente, El Tostador comercializa café arábigo cultivado a más de 1,300 metros sobre el nivel del mar, alcanzando ventas mensuales superiores a los $5,300. Este café de altura es apreciado por su sabor robusto y equilibrado, y su éxito en el mercado nacional es testimonio del compromiso de Jaramillo con la calidad y el desarrollo de la industria cafetera de Loja.
Conclusión: El Café de Loja, Tradición y Futuro
l café lojano ha alcanzado un lugar especial en el mercado nacional e internacional, destacándose por su diversidad y calidad. Desde la Hacienda San Lorenzo y su innovador enfoque de producción, hasta las prácticas sostenibles del Café Ecológico Las Aradas, el café de Loja representa una combinación de tradición, tecnología y compromiso con la naturaleza.
Marcas como Café Dagadá, Café Surapo y otras han demostrado que el café lojano puede competir con los mejores del mundo, conquistando a los consumidores por su sabor y su historia. Con el apoyo continuo a los caficultores y el respeto a las prácticas sostenibles, el café lojano seguirá abriéndose camino en el mercado internacional, llevando consigo las tradiciones y la pasión de sus productores.